Tarta tres chocolates, la original

Esta receta es mía de mí, la cree en el 2005, nada más y nada menos, aunque circulan muchas versiones por ahí con variaciones. Eso está bien porque significa que es una receta con mucho éxito, La podeis convertir en vegana muy sencillamente, usando chocolates veganos y leche y nata vegetales.

De un sólo chocolate, negro puro, por ejemplo, también queda muy bien, de hecho la receta original era así, de una chica llamada Mª José y luego un malagueño, de nombre Juan la transformó en una tarta de 2 chocolates. A partir de esas 2 recetas y variando algo los ingredientes, yo creé esta tarta, que siempre ha tenido mucho éxito y circula por Internet con alguna que otra variación que le han hecho otras personas.

Ingredientes:

150 g de chocolate negro

150 g de chococolate con leche

150 g de chocolate blanco

450 g de azúcar (para los poco golosos, reducir la cantidad de azúcar al gusto)

1 litro de nata

1/2 litro de leche

3 sobres de cuajada (la de marca Eroski no lleva cuajo)

galletas María 1 rulo aproximadamente

margarina

Preparación:

Mezclé la nata con la leche y lo repartí en tres porciones de medio litro cada una.

Cubrí el fondo de un molde desmontable con una mezcla de galletas María pulverizadas y margarina fundida bien mezclada. Se va extendiendo con los nudillos hasta que cubra todo el fondo.

Se pone medio litro de nata y leche, con el chocolate negro, 150 g de azúcar y un sobre de cuajada en el vaso de la Thermomix, 7 minutos, a 90º, velocidad 5. Se vuelca sobre la masa de galletas. Se deja enfriar y cuajar.

Hacemos lo mismo con otro medio litro de nata, 150 g de azúcar el chocolate con leche y otro sobre de cuajada. Volvamos con cuidado sobre la capa de chocolate negro ya cuajada. Dejamos cuajar.

Lo mismo con el resto de nata, de azúcar, el otro sobre de cuajada y chocolate blanco y lo vertemos sobre la capa de chocolate con leche.

A la nevera con ella y para desmoldar se puede hacer cuando esté ya cuajada, dejando la base del molde desmontable o, como hago yo, congelando la tarta y desmoldándola completamente, la adorno y dejo descongelar en el frigo. Es muy vistosa y muy rica.

NOTA IMPORTANTE: No dejar que se ponga dura una capa antes de poner la otra, porque si no no se pegan. La capa de abajo ha de estar cuajada pero pegajosa aún. Echar la capa de arriba con cuidado, despacito para que no haga agujero en la de abajo.

VERSION SIN THERMOMIX (para cada capa serían 500 cc de mezcla de leche con nata) (no sé quien hizo la adaptación, pero no es mía)

Capa chocolate negro: Separar una taza de leche y disolver en ella el sobre de cuajada.

Poner a hervir el resto de los 500 cc de nata y leche con 150 g. de azúcar.

Unir el chocolate negro y remover hasta que derrita.

Añadir la cuajada disuelta y remover hasta que hierva durante 2 ó 3 minutos.

Verter en el molde encima de la base de galletas.

Capa de chocolate con leche:. Separar una taza de leche y disolver en ella el sobre de cuajada.

Poner a hervir el resto de la leche con nata (de los 500 cc de esta capa) y 150 g de azúcar.

Unir el chocolate con leche y remover hasta que derrita.

Añadir la cuajada disuelta y remover hasta que hierva durante 2 ó 3 minutos.

Verter en el molde sobre el chocolate negro con ayuda de una cuchara para que no haga agujero.

Capa de chocolate blanco: Separar una taza de leche y disolver en ella el sobre de cuajada.

Poner a hervir el resto de la leche y nata de esta capa con 150 g de azúcar.

Unir el chocolate blanco y remover hasta que derrita.

Añadir la cuajada disuelta y remover hasta que hierva durante 2 ó 3 minutos.

Verter en el molde sobre el chocolate con leche con ayuda de una cuchara para que no haga agujero.

La base de galletas y la finalización de la receta es igual que en la versión Thermomix.

HAY QUIEN ENCUENTRA MUCHO 150 G DE AZUCAR POR CAPA, PARA MI ESTA PERFECTA, PERO PARA GUSTOS...

(La he probado siguiendo las recomendaciones de una gran cocinera, Auro, que le pone menos azúcar en la capa de choco con leche y nada en la capa blanca. A mí me sabe sosísima y en casa opinan lo mismo, porque somos muy golosos).